No me gusta usar colores claros. Nunca me ha gustado, por lo que salir a la calle vistiendo colores claros es algo que no me convence totalmente. No me importa demasiado lo que los demás piensen, el problema es que me hace ver como un idiota. Sí, como un verdadero idiota. O quizás me veo como un idiota porque soy un verdadero idiota. No lo sé, el tema es que no me gusta usar colores claros.