En éste momento están pasando a Abigail Pereira por la tele, demostrando que las producciones nacionales definitivamente han caído bajo. En sí, no tengo problema por la gente que"opta diferente" (es la manera políticamente-correcta de decirlo, que básicamente es un eufemismo de "se la come"), pero que usen travestis en "obras" de teatro como recurso, me parece algo ridículo. A veces, las fórmulas para conseguir una obra teatral perfecta se tergiversan, tal como lo hacen las fórmulas para crear un programa con rating (parece que ahora todas las series tienen que tener a una persona psycho que se obsesiona con otra y mata a alguno). En éste caso, la fórmula de la obra perfecta se ha modificado, porque parece que toda obra DEBE tener un travesti "actuando" (léase mostrar el cuerpo y gritar con voz de hombre). Básicamente, los tienen ahí para llamar la atención. La gente piensa "ah, un travesti, yo quiero ir a ver al travesti", y VOILÁ, tenés un espectáculo con éxito.
Pero a qué costo? Al costo de que se pierda la parte creativa de los guiones, la música, y finalmente se cambie la importancia de las cosas. AL carajo con el humor, parece que ahora, el programa que muestra más culos es el que tiene más rating.
Estoy medio cruzado por eso.